El programa electoral con el que Podemos concurrió a las elecciones europeas incluía entre sus propuestas la eliminación de la red de vigilancia SIVE y de la anulación del Frontex. Dos medidas que, según los expertos en seguridad consultados, supondría la permeabilidad de las fronteras marítimas españolas ante el terrorismo, el narcotráfico y las mafias
El punto 4.3 del programa de Podemos, titulado “Reconocimiento del derecho de los y las emigrantes”, incluye una serie de medidas que tendrían efectos colaterales “devastadores” para la seguridad nacional, según fuentes del Estado involucradas en el control marítimo.
En concreto, propone la “eliminación” del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE), “una de las herramientas más eficaces para luchar contra la llegada de mafias de tráfico de personas, del narcotráfico y del terrorismo”.
El enfoque del partido de Pablo Iglesias busca otorgar un régimen legal “garantista” frente a la inmigración ilegal. Sin embargo, explican estas fuentes, el SIVE “no sólo está concebido para frenar las pateras, sino asuntos mucho más peligrosos”. Sin el SIVE, dicen, España sería un “país permeable” a amenazas llegadas del mar.
Por ejemplo, recuerdan los recientes llamamientos de Al Qaeda para realizar atentados con bomba contra petroleros que crucen el Estrecho de Gibraltar, o que estén fondeados en puertos como Gibraltar o Algeciras, buscando un perjuicio para la economía mundial. Pero también indican que reducir la vigilancia de la zona como propone Podemos “permitiría que sospechosos con intenciones terroristas entraran más fácilmente por mar en la Península o en Canarias”.
El SIVE, operado por la Guardia Civil, se basa en una red de estaciones de vigilancia –con cámaras capaces de detectar objetivos a 5 kilómetros- instaladas a lo largo de la costa andaluza y de las Islas Canarias. Su objetivo es detectar de forma temprana la llegada de cualquier tipo de embarcación sospechosa de llevar inmigrantes ilegales o cargamentos de droga principalmente.
Por otra parte, Podemos apuesta también por anular la aportación de España a programas como el FRONTEX o el Eurosur, aprobados por el Parlamento Europeo.
Fuente : ECD