Londres confirmó la escala en el Peñon de Gibraltar de una poderosa flota de guerra cuyo buque insignia es el portahelicópteros HMS Illustrious. Por parte británica y española se han dado todo tipo de explicaciones. La flota de la Royal Navy fondeará en la base militar del Peñón para participar posteriormente en grandes maniobras.

El ministerio de Defensa señaló que conocía la escala en la base de Rota, en Cádiz, del portahelicópteros HMS Illustrious al que acompañan tres fragatas y sus buques de escolta y apoyo. El anuncio se hizo tras el fracaso de la conferencia telefónica entre David Camerón y Mariano Rajoy. Por parte británica, como destacó Hechos de Hoy, sobró aspereza entre dos países que son aliados.

Lamentablemente, no se produjeron avances sobre Gibraltar con el ingreso de España en la OTAN. Tampoco, y eso fue verdadera penoso, se pudo culminar un pacto histórico en el momento de mayor cordialidad en las relaciones hispano-británicas bajo los gobiernos de Tony Blair y José María Aznar.

Cameron, en plena crisis diplomática, debió anular estas maniobras. Coloca a Rajoy en mala posición con su hostigamiento. En lugar de buscar posiciones moderadas, Cameron cede a la presión de la extrema derecha británica en momento de mayores desafíos para los socios europeos a los que no debe distraer ninguna crisis menor. Si Cameron desilusionó en otras acciones, no cabe mayor torpeza y error con este hostigamiento innecesario a Rajoy, que no busca salidas sino las encalla y agrava. Absolutamente lamentable.

Fuente: Hechos de Hoy