España, objetivo de los servicios de espionaje USA ante un posible conflicto en Marruecos

españa-observaEspaña se ha quedado sin Fuerzas Armadas, se ha enviado al desguace el buque insignia y sus cinco submarinos han quedado sin operatividad

 Según publica El Mundo Finaciero.Com,las últimas informaciones publicadas por el semanario alemán Der Spiegel ponen de manifiesto que España, como unidad política encuadrada tanto en la UE como en la OTAN, no es aún un estado fiable. Las revelaciones publicadas proceden, según cita el propio periódico, de la fuga de documentos provocada por el exanalista de la CIA Edwuard Snowden, y se desprende que España es un ‘objetivos a espiar’ por la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de EEUU.

Las fuentes de información y de los servicios especiales de algunos países, como China, Rusia o Francia, están cada vez más convencidos de que Estados Unidos ha colaborado “más estrechamente” con Alemania en la instalación del espionaje en el entorno europeo que con el resto de sus socios OTAN. La situación deviene del final de la II Guerra Mundial, primero porque era necesario establecer un control rígido sobre todos aquellos colaboradores de la finalizada Alemania nacionalsocialista, pero inmediatamente después, porque Alemania quedó dividida en dos estados que supusieron la escenificación más visual de la Guerra Fría: Alemania se convirtió en un “punto caliente” del espionaje internacional, y trasiego de informadores, intercambios de espías o camino seguro para cruzar de un lado para otro del Telón de Acero.
¿Qué queda de todo aquello? Como mínimo un sistema de información bastante fiable establecido durante décadas por los servicios de inteligencia de diversos países, Alemania se ha sentido también espiada, y ya se han convocado en el país germano diversas protestas y manifestaciones contra el espionaje USA.
Las prioridades de la NSA se establecían de manera bastante básica y sencilla –la inteligencia no es demasiado complicada, sino todo lo contrario, muy directa-, de acuerdo con una escala que va del “1″ -o máximo interés- al “5″ -escaso interés-.
Por países, Alemania está en situada en los rangos intermedios, apunta el semanario, al mismo nivel que Francia y Japón y por delante de Italia y España. En cuando a focos de interés, en lo que a Alemania se refiere los aspectos prioritarios de la política exterior, así como la estabilidad económica y el análisis de riesgos financieros, al parecer situados en la escala 3. Por detrás quedarían países como Camboya, Laos, Vaticano, Finlandia, Croacia, Dinamarca o República Checa, clasificados en el nivel 5. Los objetivos de máxima prioridad, según ese medio, de la NSA son China, Rusia, Irán, Paquistán, Corea del Norte y Afganistán.
Es decir, que de los tiempos de la Guerra Fría poco o casi nada ha cambiado
Según dichas informaciones ahora hechas públicas, las cuestiones del máximo interés son la exportación de armas y comercio internacional en el eslabón de prioridades número cuatro, mientras que los ciberataques no son tan importantes –porque los centros neurálgicos ya están protegidos con cierto nivel de garantía- están tipificados con el “5″.
Los documentos constatan que la Unión Europea (UE) es objetivo para los ataques del espionaje cibernético estadounidense, especialmente en los ámbitos de política exterior, comercio internacional y estabilidad económica, todos ellos de rango “3″.
Pero, y de España, ¿Qué hay que espiar?
La NSA establece todo un amplio horizonte de información, todos los territorios son objetivo, unos con mayor intensidad, otros con menos. España se sitúa en una posición intermedia, parecida a la de Italia. Nuestro país siempre ha sido “inseguro” desde el punto de vista político. España no ofrece muchas garantías en algunas cuestiones básicas para la seguridad y defensa que interesa al entorno OTAN. Ya la propia manera de entrar en la OTAN, mediante un referéndum que intentó adherirnos sin pertenecer a la estructura militar, pareció insólita.
La situación actual de España es además muy diferente a la de hace solo tres o cuatro años
Los servicios de inteligencia de todas las potencias exteriores instaladas en nuestro país han quedado pasmadas ante la situación real a la que han llevado los recortes del Gobierno Rajoy: España se ha quedado sin Fuerzas Armadas, se ha enviado al desguace el buque insignia y sus cinco submarinos han quedado sin operatividad. Incluso la serie S-80, que se pretende construir en los astilleros de Cartagena, ha quedado inicialmente paralizada bajo la excusa de un deficiente cálculo estructural, aunque algunas informaciones apuntan a los drásticos e injustificados recortes del ejecutivo Rajoy.
España es prácticamente el único país de la UE que cambia algunas políticas fundamentales cuando se sustituye el gobierno por causas electorales: Aznar tuvo la valentía de intentar transformar el carácter de España de “colonia” norteamericana a “provincia”, puso con Bush las botas en la mesa y se pateó los ranchos tejanos. No funcionó. El siguiente presidente español, Rodríguez Zapatero, era un hombre del “no a la guerra” y que permanecía sentado al paso de las banderas americanas desfilando.
Los atentados del 11-M fueron muestra patente de que los servicios de inteligencia españoles solo funcionaban para algunas cosas, y se demostró su escasa fiabilidad
El Gobierno de España suele cambiar sensiblemente tanto la política exterior como la de defensa cuando se cambia de gobierno, y ese es un eje prioritario para cualquier servicio de inteligencia: saber que va a hacer un gobierno dado en un momento dado. España no ofrece seguridad ni fiabilidad, y sus decisiones, al contrario de las que pueda poner en marcha Francia, Alemania o Reino Unido, no son previsibles.
El llamado “conflicto” de Gibraltar podría encuadrarse en ese mismo tipo de “cosas raras” que hace España
¿Cómo puede justificarse tal maniobra de distracción del Gobierno Rajoy frente al Reino Unido, aliado nuestro en el marco de la OTAN? Por Gibraltar pasa un cable submarino de control de tráfico marítimo que llega hasta las costas africanas –en Marruecos-, y que es clave para la defensa del Mediterráneo. Y Gibraltar es base de la OTAN. Ya circula por algunas delegaciones de países de la Commonwealth del Comité Olímpico Internacional un cable con algunas indicaciones de lo que se debe apoyar de cara a la elección de la sede para los Juegos Olímpicos del 2020, y no figura ningún país europeo en las previsiones. Paradójicamente, ante un posible conflicto con, por ejemplo Marruecos, es altamente probable que la Armada británica tuviera que acudir en apoyo de España, como aliado OTAN. Y que los buques en defensa de una España sin Armada, se establecieran en Gibraltar.
Todas las cosas tienen un coste, es posible que España no tenga bien enfocadas sus prioridades de inteligencia, y debiera comenzar a corregirlas para no seguir perdiendo trenes.
La seguridad y defensa colectivas con nuestros socios, amigos y aliados, debería estar entre las primeras.
Fuente : NorteAfrica
Carmen D