Los ataques cibernéticos constituyen hoy una seria preocupación para la OTAN y de hecho ya el Concepto Estratégico de la Alianza desarrollado en la Cumbre de Lisboa y confirmado en la última de Chicago así lo manifiestan. Las acciones cibernéticas se ejecutan las más de las veces como acciones clandestinas y no trascienden al conocimiento público pero en estos momentos están cobrando una presencia real en el conflicto no declarado Irán/Israel. Es evidente que la preocupación de los dirigentes de la Alianza tenía y tiene serios fundamentos.
Sabemos que el pasado día 6 de Octubre un vehículo aéreo no tripulado – un drone – penetró en el espacio aéreo israelí siendo detectado y derribado con posterioridad; si bien es cierto que fue capaz de escapar a las detecciones tempranas de la defensa aérea israelí lo que ha ocasionado una seria preocupación en los responsables de la misma.
Desde hace más de un lustro la inteligencia norteamericana y el propio Mossad israelí vienen advirtiendo del elevado número de estudiantes iraníes que tras terminar sus estudios de electrónica e informática avanzada en universidades de los EEUU , de Gran Bretaña y de Francia retornan a Irán y son destinados al desarrollo de programas militares de avanzada tecnología. Entre éstos destacan los relacionados con la guerra electrónica y el dominio de la cibernética en combinación con los medios aéreos no tripulados.
No es de extrañar, entonces, que existan proyectos avanzados de este tipo de medios con características “stealth” (no detectables) con gran capacidad para la guerra electrónica y cibernética. Son conocimientos también adquiridos de medios comprados a Rusia y China sin olvidarnos de la segura canibalización del drone RQ – 170 americano que cayó al suelo en diciembre de 2011.
Uno tiene la impresión que el drone derribado por la fuerza aérea israelí el pasado día 6 de octubre no ha supuesto otra cosa que una acción de tanteo por parte de los técnicos iraníes y que éstos se hallan enfrascados ya en el desarrollo de medios muchos más sofisticados.
Hablemos, por ejemplo, del drone denominado Ababil-T ya en servicio operativo. Un sistema con capacidad para la guerra electrónica, recogida de información y con capacidad de transmisiones on-line. Un sistema diseñado ad-hoc para inhabilitar las defensas electrónicas de Israel y de los EEUU. Las fuentes de inteligencia occidentales atribuyen a este UAV un alcance máximo de 150 km y una permanencia en vuelo de hasta 10 horas. En estas condiciones no es posible su empleo desde el propio territorio iraní y es necesario utilizar suelo libanés.
Sin embargo la ingeniería iraní ha logrado según manifiestan fuentes de este país modernizar el modelo y han logrado desarrollar medios con un alcance de 2000 km lo que ya es otro cantar y motivo serio de preocupación en el Estado Mayor israelí. Si nos atenemos a la propaganda iraní se puede dar por hecho que uno de estos modelos ya ha sido experimentado teniendo como objetivo a la V flota norteamericana en el golfo pérsico y con éxito.
Si esto es cierto, o no, es algo difícilmente comprobable pero lo que no se puede negar es que estos progresos de la técnica iraní han sembrado de incertidumbre a los Estados Mayores de Israel y los EEU y de hecho las últimas maniobras en curso entre ambas naciones han tenido y tienen como objetivo principal de las mismas la ejercitación y ensayo de la defensa del espacio aéreo israelí. Digo yo que por algo será.
Y vaya si es por algo pues parece probado que el UAV derribado el ya citado día 6 de octubre antes de ser abatido voló sin ser detectado a lo largo de toda la costa norte sur de Israel, sobre los yacimientos de gas e incluso sobre el puerto de Haifa, estaciones eléctricas y nada menos que sobre las bases navales de Haifa y Ashad.
Inaudito.
Parece ser que de los restos del UAV derribado se ha podido comprobar que éste estaba construido con una fibra de cristal que lo hace indetectable y que es una técnica que sólo desarrollaba la industria aérea norteamericana. Hasta ahora.
Sí. Existe una pléyade de ingenieros iraníes – muchos formados en occidente – dedicados de lleno a la industria militar. Los resultados de sus investigaciones están empezando a dar sus frutos lo que ocasiona una preocupación creciente en Israel y en los EEUU.
Cuando estas líneas vean la luz ya se habrán celebrado las elecciones en los EEUU y comenzarán a despejarse incógnitas de la futura política exterior de este país; entre otros asuntos la relacionada con el conflicto Irán/Israel y el previsible ataque preventivo contra las instalaciones nucleares de Irán. Las diferencias ideológicas entre demócratas y republicanos no suelen ser por tradición muy acentuadas, por lo que se refiere a la actitud norteamericana en el exterior, pero en esta ocasión parece que sí lo son; de ahí la importancia de lo que suceda.
En este sentido me llama poderosamente la atención la constitución virtual de un Consejo Militar de Asesores que se titula “Romney for President” y en el que se integran más de 200 Oficiales Generales – retirados – entre los que destacan antiguos altos mandos de sus Fuerzas Armadas como los Generales Tommy Franks que fue Comandante del Mando Central, James Conway que fue Comandante General de la Infantería de Marina, Hugh Shelton que fue Jefe del Estado Mayor, Almirante Busey, Almirante Fitzgerald… etc. No están en activo y son libres de expresar sus opiniones reflejando el sentimiento de la mayoría de la Institución militar.
Este Consejo virtual, pero de gran influencia, considera que la situación respecto al conflicto Irán/Israel no admite más dilaciones y que se acerca la hora del apoyo sin paliativos a Israel antes de que Irán disponga del arma nuclear.
Mientras tanto la ingeniería iraní avanza y progresa a pasos agigantados.
Fuente: Republica