La constructora naval Navantia y la Armada española están buscando soluciones a los problemas que han surgido en la construcción de los submarinos S80, cuya primera unidad iba a botarse este mismo mes. Fuentes directas del programa español de sumergibles han explicado a Infodefensa.com la necesidad de variar algunas características contempladas en el diseño inicial de los buques.
Según publicaba El Confidencial Digital hace unas horas, el nuevo submarino S-80 pesa demasiado, por lo que Navantia deberá alargar las cuatro naves previstas para garantizar su flotabilidad.
Navantia ha apuntado a Infodefensa.com que no confirma ni desmiente estas informaciones porque ésa no es su política de información, si bien ha explicado que están buscando soluciones a los problemas que han surgido en la construcción del submarino.
Ante el nuevo panorama, la botadura de la primera unidad, el S-81, prevista para este mismo mes, queda retrasada. En las próximas semanas se tomará una decisión acerca de la nueva reprogramación de los submarinos S-80, a raíz de estos problemas surgidos durante su construcción.
Infodefensa.com está a la espera de que la Armada pueda ofrecer la información que le ha solicitado sobre este asunto, lo que previsiblemente ocurrirá en las próximas horas.
El nuevo retraso en la entrega de los S-80, que hasta el momento estaba prevista a partir de marzo de 2015, pone sobre la mesa la necesidad de realizar las obras de gran carena del submarino Tramontana (S74), que debían comenzar este año, aunque están en el aire por los recortes presupuestarios del Gobierno, como publicaba hace unos días el diario La Verdad de Murcia en una información donde ya se insinuaba un nuevo aplazamiento en el programa de los S-80 por cuestiones técnicas, aunque sin especificar de qué naturaleza.
Un programa de 1.800 millones
El programa S-80, que supone una inversión estimada de 1.800 millones de euros, ya había sufrido varios retrasos anteriormente que lo habían alejado del plan inicial de entregar el año pasado el primer sumergible a la Armada Española.
La agenda manejada hasta ahora estimaba la puesta a flote de la primera de las naves este mismo mes, la de la segunda debía llegar en marzo de 2015; la tercera, en septiembre de 2016, y la cuarta, en noviembre de 2018.
Una vez que se conozca el nuevo calendario de botadoras, la entrega a la Armada de cada buque se alargará entre un año y medio y cerca de dos años. Sobre todo se alargará el periodo previo hasta la entrega de la primera, que es con la que se adquirirá la experiencia para las siguientes. Así, la previsión que se manejaba hasta ahora, y que va a sufrir los cambios que se conocerán en las próximas semanas, estimaba que la entrega del S81 se realizaría en marzo de 2015; la del S82, en noviembre de 2016; la del S83, en marzo de 2018, y la del S84 en mayo de 2019.
Como apunta el jefe de Programa del S80, Donato Martínez, se trata del primer submarino que diseña y construye íntegramente Navantia, “y además supone un salto tecnológico muy importante: va a ser el submarino convencional más avanzado que haya en el mundo”.
Sobre él han puesto de momento sus ojos las armadas de Australia, India y Noruega, que lo han incluido entre las opciones para sus futuros programas de sumergibles.
La sociedad pública de construcción naval militar Navantia fue creada en el año 2005 como resultado de la segregación de los activos militares de la empresa pública Grupo IZAR.
Fuente: InfoDefensa