El ministro de Defensa, Pedro Morenés, considera que «la Defensa en España nunca ha estado bien financiada» porque el país ha tenido «otras prioridades» y porque existe una «cierta ignorancia de lo que supone la política de Seguridad y Defensa», que, en su opinión, se da por hecha y parece que necesita financiación.

Morenés ha reconocido, en una entrevista en el programa «Los desayunos de TVE», que el Gobierno lleva tiempo intentando explicar que «la Defensa es un servicio público» que hay que apoyar, porque «es la base del Estado de Derecho». Para Morenés, los países que tienen una conciencia mayor de lo que significa la seguridad y tener peso fuera de su ámbito, como los sajones, han capitalizado el protagonismo en la escena internacional en los últimos años.

A pesar de que, a veces, se apunta a Defensa como el Ministerio que primero debe acometer recortes, las Fuerzas Armadas son una de las instituciones mejor valoradas por los españoles. Morenés ha destacado que las FAS suponen «un referente de credibilidad moral y de estabilidad como institución», en un momento en el que otras «instituciones lo están pasando mal». Sin embargo, la imagen de las Fuerzas Armadas no ha emergido, sino que, según Morenés, está «sólidamente puesta», con unas «convicciones democráticas y unos principios que hace que la gente se mire en ellas».

El ministro de Defensa recordó que Defensa perdió en 2012 un 7% de su presupuesto e insistió en que su departamento ha perdido, desde que empezaron los recortes a Defensa, «un treinta tantos por ciento» y «casi un 80% en el capítulo de inversiones». Por eso, para Morenés, la Defensa no se ha financiado como en Francia o «como en otros países de nuestro entorno», que dedican en torno al 1,7% – 2% de su Producto Interior Bruto al presupuesto del Ministerio de Defensa.

Estos recortes, y también porque hay que adaptarlos a la «realidad política – social» y a las amenazar, obligan a reorganizar la estructura de los Ejércitos. Para el ministro existe un gran reto, el adaptar «el recurso frente al riesgo, que se mueve a alta velocidad», a la vez que se debe conjugar el tiempo necesario para planear y ejecutar nuevos programas, que tardan «ponerse en marcha 10 años», con las amenazas, que cambian en semanas o «cada 20 días».

El ministro ha subrayado la necesidad de que España cuente con una industria de Defensa «poderosa, que no esté atomizada y que no sea abordable por intereses no españoles». La receta de Morenés para conseguirlo pasa por «hacer las cosas de manera competitiva y rentable», algo que Defensa está intentando potenciar ayudando «a vender lo que no puede comprar», con el objetivo de «salir de la crisis con la industria reforzada».

Morenés ha centrado el foco en uno de los sistemas en los que más innovaciones están apareciendo: los aviones no tripulados. El ministro ha resaltado que estos sistemas son «el futuro», porque tienen capacidad de «volar a menos velocidad y de hacer varios tipos de misiones» y porque»no ponen en riesgo la vida de pilotos», un valor esencial en un contexto en el que la pérdida de vidas humanas no es aceptable por las sociedades occidentales.

«En Afganistán vamos mucho mejor que el calendario previsto», ha subrayado Morenés, que ha destacado que las Fuerzas Armadas lo han hecho «muy bien» y han cumplido la misión. Sin embargo, ha advertido de que no se puede bajar la guardia durante el repliegue, la fase «más peligrosa» de la misión, porque «los insurgentes van a querer ganar una batalla que han perdido».

En cuanto a la situación de la misión en Líbano, el ministro de Defensa ha destacado que el año pasado España retiró 600 efectivos, la mitad del contingente, porque la ONU consideró que había que reducir la misión. Morenés, que reconoció que le gustaría que las tropas españolas salieran del país en 2014 o 2015, ha insistido que España se irá de Líbano «cuando se cumplan 3 elementos: el cumplimiento misión, el compromiso con los socios y la garantía, por encima de todo, de la seguridad de las tropas».

Sobre un posible enfrentamiento con el ministro de exteriores, Juan Manuel García-Margallo, que la semana pasada insistió en que España no se irá aún de Líbano, Morenés ha insistido en que no hay «malentendidos» y ha subrayado que la política de Exteriores y de Defensa la establece el presidente del Gobierno, no los ministros. «España está en Líbano para cumplir misión, que se está cumpliendo», ha añadido el ministro, que ha reconocido que la situación en Siria «se está complicando y podía afectar» la situación del país, «aunque no en este momento».

La situación de Siria es un «ejemplo claro» de como la ONU está permitiendo que «ocurra lo que está ocurriendo», porque China y Rusia se oponen en el Consejo de Seguridad a intervenir. «Es una contradicción brutal», ha dicho el ministro, que ha reconocido que la posición de nuestro país va dentro de la ONU, aunque «España estará con cualquier organización que intervenga para evitar la catástrofe que ocurre, ante ojos de un mundo que se cree civilizado y permanece inmóvil ante tal barbaridad».

Fuente : ateneadigital

Carmen D