Con el carnaval de trasfondo, el botellódromo de Pontevedra fue este fin de semana escenario de una multitudinaria pelea en la que, supuestamente, una pandilla de jóvenes disfrazados de militares agredieron a un grupo de alumnos de la Escuela Naval Militar de Marín que estaban de paisano. En principio, no se ha interpuesto denuncia alguna por lo ocurrido, si bien tanto la comisaría provincial como la jefatura municipal tuvieron conocimiento de un incidente, en el que, en principio, no se practicaron identificaciones.
Fue en la madrugada del sábado al domingo cuando las patrullas en servicio de la Policía Nacional y Local de Pontevedra fueron requeridas para que acudieran de urgencia hasta el recinto ferial. Los agentes, una vez en el lugar del incidente, se entrevistaron con varios de los agredidos y pudieron hacerse una composición de lugar.
Todo parece apuntar a que no existió una provocación previa que pudiese explicar la reyerta -hubo quien la vinculó con el consumo de alcohol-. En cualquier caso, en un momento dado de la noche, cuatro jóvenes, presumiblemente, oriundos de Marruecos y disfrazados con ropas militares iniciaron una pelea, en el transcurso de la cual se produjo la agresión a siete personas que cursan estudios en la Escuela Naval de Marín.
En principio, las lesiones que presentaban las víctimas eran de carácter leve y, de hecho, no ha trascendido que hubieran requerido algún tipo de hospitalización. Por el contrario, a priori, todo quedó limitado a unos cuantos ojos morados, contusiones y a algún que otro corte de menor entidad.
Un mando del centro de formación de la Armada se desplazó la misma madrugada de los hechos hasta Pontevedra para hacerse cargo de los alumnos. Todas las fuentes consultadas remarcaron que, pese a esta pelea, el primer fin de semana de los carnavales de Pontevedra discurrió con normalidad. En este sentido, enfatizaron que tanto el sábado como el domingo se registraron, a nivel de orden público, incidencias que calificaron de menores.
Fuente : LavozdeGalicia