Un militar resultó herido ayer en un enfrentamiento de las tropas españolas destacadas en Afganistán con la insurgencia, un combate que se prolongó durante más de once horas y en el que intervinieron medios aéreos de la OTAN. En la refriega murieron cinco talibanes y otros tres fueron heridos.
El paracaidista J. F .F., de 27 años, recibió impactos de bala en ambas piernas, aunque su vida no corre peligro. Tras caer herido fue evacuado en helicóptero a la base de Qala-i-Naw, desde donde, una vez estabilizado, fue trasladado al hospital español de Herat.
El combate se inició después de que una patrulla de reconocimiento sorprendiera a los insurgentes, que respondieron con disparos aislados a la presencia de los militares españoles. Los soldados respondieron con armamento pesado y solicitaron apoyo aéreo para facilitar su regreso a la base.
Otros ocho insurgentes resultaron muertos un la zona de Moqur durante un ataque a un puesto de observación del ejército afgano que recibió el apoyo de los militares españoles allí desplegados. La presencia de helicópteros de ataque empujó al resto de talibanes a emprender la retirada.
El ataque sufrido ayer por militares españoles en Badghis se suma a otros seis incidentes registrados en solo una semana en esta provincia, donde las tropas españolas apoyan al Ejército de Afganistán para garantizar la seguridad en la región más pobre del país. El aumento de incidentes ha coincidido con el fin del Ramadán, un mes en el que suele bajar la intensidad de los ataques, según explicaron fuentes militares. Una vez finalizado este periodo, se han recrudecido los hostigamientos con los que los insurgentes tratan de entorpecer la labor de las tropas españolas.
Fuente: Diario Vasco