Un año más, y van cuatro con este 2013, la Asociación de Periodistas de Defensa, la APDEF, ha entregado sus ya tradicionales premios a las personas y las instituciones que colaboran con los periodistas de Defensa o que han destacado por su trayectoria al servicio de la sociedad española.
Como muchos de ustedes sabrán, el premio más antiguo lleva por nombre el de un teniente general ya fallecido, Bernardo Álvarez del Manzano. Como ya lo he contado otras veces, no voy a insistir en lo que apreciábamos los periodistas de Defensa a Bernardo, pero sí tengo que recordar que, precisamente por eso, es el galardón que entregamos a las personas que más nos ayudan en nuestro trabajo, que es un trabajo con el que servimos a la sociedad española.
Este año la novedad es que, por primera vez, el premio Bernardo Álvarez del Manzano se le ha concedido a un civil: Joaquín Madina Loiri, que, hasta el mes de enero, fue el director de Comunicación del Ministerio de Defensa. Los tres galardones anteriores habían sido para sendos militares: el ahora subteniente José Luis Gutiérrez, el teniente coronel Manuel Rodríguez y el capitán de corbeta Yago Ceballos.
Joaquín Madina estuvo sólo un año en ese cargo tan importante para el Ministerio de Defensa, pero en su etapa encarnó el cambio de política de comunicación que tanta falta hacía en Castellana 109. Con mucha educación, con profesionalidad, con simpatía y, en resumen, con bonhomía, Madina trazó el camino de lo que debe ser una política de comunicación corporativa eficiente y, por tanto, útil para los ciudadanos. Un camino por el que también transita su sucesor, Diego Mazón. Al recoger el premio, Joaquín demostró todo lo que digo más arriba y comenzó por dar las gracias a todos los colaboradores que le habían ayudado en su trabajo.
El acto de este jueves 30 de mayo, Día de San Fernando, se convirtió en un pequeño homenaje a Joaquín Madina, pero también a los soldados españoles que están y han estado en Afganistán, representados, en esta ocasión, por los grupos de desactivación de explosivos de la ASPFOR XXXII. El sargento Javier Martín Vicente, compañero y «binomio» del sargento David Fernández Ureña, artificiero de la misma agrupación, fallecido en enero en Afganistán, recogió el Premio Especial APDEF en nombre de todos sus compañeros.
El momento fue especialmente emotivo porque también sirvió para recordar a los brigadasAntonio Navarro García y Manuel Velasco Román y al sargento José Francisco Prieto González, los tres desactivadores de explosivos de la Legión fallecidos hace unos días en Almería.
Y finalmente, el premio Trayectoria ha sido este año para el general Alberto Asarta, que en marzo pasó a la reserva, después de más de 40 años de servicio. Su destino más importante fue en el Líbano, como comandante en jefe de la FINUL, donde estuvo al mando de 12.200 soldados de 36 nacionalidades diferentes. Alberto Asarta es otro de esos militares que siempre han conversado con naturalidad con los periodistas, sin saltarse las líneas rojas de la discreción y del cumplimiento del deber.
Esta cuarta edición de los premios APDEF ha simbolizado también el comienzo de una nueva etapa en la asociación, tras la renovación parcial de la Junta Directiva y la elección como presidente de Emilio Andréu, periodista de Radio Nacional. Han cambiado algunas personas, pero permanece lo más importante, que es el espíritu fundacional de la APDEF de defensa de la libertad de información y de mantener unas relaciones fluidas con los integrantes de las Fuerzas Armadas porque, como siempre decimos, los periodistas y los militares servimos al mismo jefe: la sociedad española.
Fuente : ateneadigital