Recortes en Defensa o cómo dejar a España sin posibilidad real de defensa autónoma

tijerasOKEl Ministerio de Defensa continúa recortando el número de efectivos en tropa y marinería de las Fuerzas Armadas, que en la actualidad se sitúa en un total de 76.699, una cifra muy por debajo del máximo de 79.000 que fijó el Gobierno para 2014 en los Presupuestos Generales del Estado y más de 9.400 militares menos con los que contaba hace cuatro años.

Por ello, parece oportuno hacer algunas reflexiones que sirvan como modesta aportación al importantísimo esfuerzo pedagógico que, en todos los niveles públicos y privados, resulta urgente realizar para llevar a la población española a concienciarse de la extraña dicotomía de unas encuestas que sitúan a las Fuerzas Armadas en el lugar del máximo prestigio entre las instituciones españolas, a la vez que esos mismos ciudadanos consideran rechazables las indispensables mejoras de financiación de nuestros ejércitos, y cuyos sucesivos recortes en el último decenio han llevado a una deuda acumulada que hace imposible enfrentar, con un mínimo de rigor, ningún presupuesto militar mientras no se resuelva tan importante problema financiero.

Resulta preciso señalar que, a la hora de distribuir este esfuerzo de toda la Administración, se debe tener muy presente la situación de la que parten los diferentes ministerios que han de llevarla a efecto. En el caso del de Defensa, la situación de las Fuerzas Armadas está ya tan bajo mínimos, que las posibilidades, tan sólo de mantenimiento y adiestramiento de los sistemas de armas de que disponen es tan extraordinariamente ajustada, que cualquier corrección a la baja puede dejar a los ejércitos sin capacidades operativas para cumplir su trascendental misión que, no lo olvidemos, debe estar centrada en la defensa militar de España, además de realizar todas las tareas de mantenimiento de la paz que el Gobierno le ha encomendado en los últimos tiempos, en cumplimiento de las obligaciones contraídas con nuestros socios y aliados. Y quedarse sin capacidades operativas para la defensa de España es tanto como decir dejar a España sin posibilidad real de defensa autónoma, lo que reduce la capacidad de decisión política.

Si pretendemos seriamente, como enunció el presidente del Gobierno, recuperar el peso que nos corresponde en el concierto mundial, será preciso apoyarse en tres condiciones que dan calidad a una nación ante el resto del mundo: una economía fiable, una política exterior claramente definida y una defensa creíble. Si se nos cae una de las tres puede derrumbarse nuestro prestigio internacional, ya de por sí no muy boyante.

Fuente : minutodigital