Quedan pocos meses para terminar la legislatura.

En el Congreso ustedes son 350, de los cuales 52 forman parte de la Comisión de Defensa del Congreso. Han estado más de 2 años tramitando la reforma de la ley de la carrera militar en cumplimiento de un mandato legislativo del que no han respetado ni los plazos. Comparecencias, estudios, informes, etc. y por último, la ratificación y aprobación del informe sobre el Proyecto de Ley por la que se modifica la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la carrera militar. Por educación prefiero no comentar la intervención de algunos portavoces en la sesión de ayer.

¿Ustedes saben sobre qué están legislando? ¿Conocen nuestros problemas o nuestro trabajo? ¿Las consecuencias nefastas que la ley que pretende reformar ha tenido y seguirá teniendo sobre los suboficiales, abandonados por todas las leyes de personal? ¿En qué situación dejan a un colectivo que por su renuncia a una parte de sus derechos constitucionales no puede defenderse de los abusos de la Administración o de los Gobiernos?

Son ustedes responsables de legislar. De que se respeten principios fundamentales como el de justicia o de seguridad jurídica. De que el recorte de derechos no conlleve indefensión a los abusos. Pero es muy difícil cuando desconocen las particularidades de la vida militar, nuestras necesidades, nuestros agravios, nuestro trabajo. Este absoluto desconocimiento, que comparten muchos altos cargos civiles y algún militar del propio Ministerio de Defensa, es en parte por un asesoramiento torticero de un sector del colectivo muy interesado en mantener y aumentar prebendas; pero innegablemente, tiene una componente fundamental de dejadez en sus funciones.

La modificación legislativa no da respuesta a los errores de la 39/07 y abandonan al colectivo en peor situación de la que estaba cuando iniciaron la legislatura generando más frustración. Es cierto que reparan alguna gran estupidez legislada por sus antecesores, pero su desconocimiento, desinterés o incapacidad han dinamitado la oportunidad y con ella nuestras esperanzas en una legislación de personal justa, que equiparase a los militares con el resto del personal de la Administración, como ciudadanos de pleno derecho que ahora NO somos.

Sabemos que no todos ustedes son iguales; que algunos son sensibles a nuestros problemas y que esto suele ocurrir cuando no tienen responsabilidades de gobierno, pero en democracia la mayoría decide que hacer pero todos somos responsables.

En nombre de los militares a los que represento y en el mío propio les deseo que en las próximas elecciones cada uno de ustedes recoja lo que han sembrado estos 3 años y medio.

Pedro Amador Romero

Presidente de ASFAS

Fuente: ASFAS