Juan Chicharro: «Ntra. Sra. del Carmen, patrona de La Armada»

Juan_ChicharroEl 16 de julio, la Armada, la marina mercante, la de pesca y la deportiva celebran la festividad de Ntra. Sra. del Carmen. Este día los puertos españoles son testigos de procesiones marítimas, sonar de sirenas y toda una parafernalia de la cohetería tan habitual en nuestro país. Cualquiera que este día se encuentre en una localidad costera comprobará fehacientemente cuanto digo.

España es un país cuando menos curioso. Al menos en lo que se refiere a sus actividades colectivas y muy en especial las que tienen connotaciones religiosas. Trataré de explicarme.

Recuerdo, aún perplejo, como hace años una autoridad del Estado recibía en audiencia a la corporación de una población del entorno de Madrid y esta regaló a la misma, como recuerdo, una medalla de la Virgen Patrona de la ciudad. Nada tendría de extraño este hecho si no fuera porque dicha Corporación era de mayoría social comunista y su Alcalde militante activo del entonces PCE. Vivir para ver.

Más perplejo se queda uno cuando ve en nuestras ciudades y pueblos, como en Semana Santa, poblaciones que votan masivamente a partidos políticos partidarios del aborto, de la eutanasia, de los matrimonios homosexuales,… etc., en definitiva de conceptos absolutamente contrarios a los defendidos por la iglesia católica, se lanzan a las calles con fervor inusitado para implorar a las vírgenes respectivas toda clase de bienes. Todavía está por ver a algún partido gobernante, por ejemplo en Sevilla, que coherente con lo que defienden en sus postulados políticos, se atrevan a no estar presentes, o acompañando, a La Macarena o a La Esperanza de Triana.

Si, España le deja a uno atónito.

Sin embargo, si hay alguna tradición coherente con la vocación es la de la celebración de la Virgen del Carmen. Veamos porque pienso así.

Hoy es más habitual que antaño el manifestarse agnóstico y ateo. Esto se traduce por ejemplo en la merma del número de celebraciones religiosas tales como bautizos, bodas… etc. Sin duda una actitud coherente con la forma de pensar citadas y muy respetable. Sucede, sin embargo, que cuando las cosas vienen mal dadas, por ejemplo ante situaciones de riesgo de muerte, la situación varía notablemente. Estoy harto de ver a muchos pregoneros del agnosticismo persignarse una y otra vez – o sea, rezando – cuando se han de enfrentar a la posibilidad del paso al más allá.

La Armada española desempeña sus cometidos muchas veces en situaciones muy inciertas. La mar es así y es precisamente esta circunstancia la que imprime carácter a sus componentes. El marino ve la cara del peligro muchas veces y por eso reza.

Hay una placa en la capilla de la Escuela Naval Militar que dice ” aquel que no crea en Dios y no rece, que vaya por esos mares y verá que pronto lo aprende”. Todo aquel que haya experimentado alguna incidencia en un submarino en inmersión, ante una mar encabritada de noche, en una embarcación de desembarco … etc., saben bien de lo que hablo. Por eso, si alguna vez tiene Vd., lector, la oportunidad de ver a los componentes de la Armada cantarle la Salve Marinera a su Patrona la Virgen del Carmen no se extrañe de la devoción y fuerza con que lo hacen.

Lamentablemente no tendrá muchas opciones de ello, pues hoy, la presencia de nuestra Armada en nuestro litoral es cada vez más escasa. La desaparición de una gran parte de sus buques menores que otrora tenían base en puertos del litoral español, así como la desaparición de muchas de las Comandancias y Ayudantías de Marina, han ocasionado que el conocimiento de nuestra Armada sea hoy escaso. Añádase a esto que lo que en tiempos más boyantes era habitual, como la recalada de los buques de nuestra Flota en la práctica mayoría de nuestros puertos, hoy ya no es así. En unos casos por la penuria económica, y en otros por la interferencia de la política, nuestros buques apenas visitan en la actualidad puertos donde siempre fueron bien recibidos, como, por ejemplo, Bilbao o Barcelona.

Por otro lado, no se puede entender la historia de España sin la de la Armada. Hoy se habla mucho de la Marca España. Pues bien, el mayor potencial base de esa “Marca” no es otro que el peso de nuestra lengua y nuestra cultura en el mundo, producto de nuestra expansión global en siglos pasados. Una expansión que solo fue posible y sostenible gracias a los buques de nuestra Armada durante cuatrocientos años. Mejor dicho a los hombres que los mandaban y manejaban. Unos hombres que rezaban a la madre de Dios siempre.

Este día 16 de julio, de nuevo los hombres de la mar y en este caso concreto los de la Armada, volverán a implorar y rezar a su Patrona la Virgen del Carmen.

Fuente: Republica